Hoy recordamos la importancia de cuidar nuestra salud mental y de acompañar a quienes atraviesan momentos difíciles. Hablar de lo que sentimos, escuchar sin juzgar y tender una mano puede salvar vidas.
En un mundo donde muchos jóvenes y adultos se sienten presionados o solos, es fundamental promover el diálogo, la empatía y la esperanza.
No olvidemos: siempre hay alguien dispuesto a escuchar y ayudar. La vida tiene valor, y cada día nos da una nueva oportunidad de crecer, aprender y encontrar sentido.







